Los beneficios de aprender a jugar al ajedrez son numerosos para los escolares y están bien documentados. El ajedrez puede ayudar a los niños a desarrollar facultades cognitivas fundamentales, como la concentración, la memoria, la lógica y el razonamiento crítico, y a estimular su creatividad en la resolución de problemas. Jugar al ajedrez enseña también a planificar, a decidir y a desarrollar el espíritu deportivo, que son factores que contribuyen positivamente al desarrollo personal del niño.
Cada país de la Unión es responsable de organizar sus sistemas educativos y los contenidos de los currículos, pero todos están de acuerdo en que la Unión debe contribuir al desarrollo de una educación de calidad fomentando la cooperación entre países, esto es, apoyar o complementar los sistemas de enseñanza nacionales, y promover el intercambio de experiencias sobre temas comunes en materia de educación.
Los beneficios sociales del ajedrez en las escuelas –como su contribución a la integración social– fueron puestos de relieve en una declaración del Parlamento Europeo de marzo de 2012, en la que este abogaba por la introducción del programa «Ajedrez en la Escuela» en todos los países de la Unión. Se trata de un programa de colaboración entre la Unión Europea de Ajedrez, una asociación independiente con 54 federaciones nacionales asociadas, y la Fundación de Ajedrez Kaspárov para Europa. Según informa la Unión Europea de Ajedrez, el número de alumnos que aprenden ajedrez en la escuela ha ido aumentando desde entonces.
Como el ajedrez se clasifica como deporte, los alumnos pueden elegirlo como actividad opcional durante las franjas horarias dedicadas a los deportes en la escuela. También puede recibir financiación como acontecimiento deportivo sin ánimo de lucro en el marco del programa Erasmus +, el programa de la UE que financia proyectos para la educación, la juventud y el deporte.